Lo que nadie te había contado sobre tu seguro de yates: la remoción de restos
Ya lo tienes todo preparado: has programado la ruta, has comprobado las baterías de todo el equipo, has distribuido las tareas diarias en el barco, tienes la comida a punto, la maleta preparada, el seguro de yates revisado… Todo está listo para disfrutar de unas más que merecidas vacaciones navegando rumbo a Córcega, o a Ibiza, o a cualquier otro punto al que quieras dirigirte.
¡Espera! ¿Hemos dicho todo? Bueno, tal vez hay un pequeño detalle que se te escapa: la remoción de restos. ¿Sabes a lo que nos referimos? Si no te suena, tal vez deberías dejarlo todo unos minutos y leer con atención, ¡porque hay bastante dinero en juego! La remoción de restos es una garantía adicional de tu seguro de yates que te cubre el coste de reflotar tu barco en caso de naufragio.
Imagínate que estás navegando rumbo a Finisterre y que, por el motivo que sea, tu barco acaba chocando contra las rocas: es más que probable que el barco sufra daños cuantiosos o incluso que quede inservible. Y, además, las autoridades marítimas pueden exigirte que retires los restos. Si no tienes la remoción de restos contratada, tendrás que hacerte cargo del coste de este servicio. Ya empiezas a plantearte la necesidad de contratar esta garantía, ¿verdad?
Características de la remoción de restos
Como te decíamos, esta garantía cubrirá los gastos de la remoción cuando la autoridad marítima ordene su retirada debido a motivos estéticos, medioambientales o de seguridad, si estos dificultan la navegación o incluso llegan a obstaculizarla. Además, cada vez más puertos deportivos exigen tener contratada esta garantía para poder atracar en ellos, como sucede en Cantabria o en Murcia, por ejemplo.
De esta manera, en caso de accidente dentro del puerto —por ejemplo, un incendio— que acabe derivando en un naufragio, podrás retirar tu embarcación sin problema. Además, es una forma de protegerse contra los barcos viejos que quedan abandonados en sus amarres y que, por el paso de los años, acaban hundiéndose.
Muchas compañías establecen límites fijos de entre 30.000 y 90.000 € asociados al coste de este servicio, mientras que otras fijan como límite un porcentaje de la suma asegurada; infórmate bien sobre qué método aplica la compañía en la que tienes contratado el seguro de yates para no llevarte sorpresas desagradables, ¿de acuerdo?
Casos en los que tu seguro de yates tendrá que cubrir la remoción de restos
Las autoridades marítimas pueden exigir la retirada de los restos de la embarcación en diferentes situaciones. Vamos a detallar las más habituales para que las tengas presentes, ¿vale?
- Cuando la embarcación queda varada en la playa o en un arenal
- Cuando embarrancamos bajo un acantilado
- Si la embarcación se hunde en su amarre por falta de mantenimiento
- Si se hunde en el canal de entrada a puerto
- En caso de destrucción del barco por el embate del mar contra una escollera, por ejemplo
Como ves, hay muchos casos que pueden acabar provocando el naufragio de tu embarcación. Por tanto, si quieres navegar con tranquilidad te recomendamos que contactes con tu gestoría náutica especializada y realices los cambios pertinentes en tu seguro de yates. ¡No te arrepentirás!